CAJA RECUERDOS: GUILLE

Valentina y Alejandra jugaban en su cuarto bajo la atenta mirada de su abuela Carmen. Aparentemente, parecían concentradas en sus historias…

Pero estaban más pendientes de cualquier ruido proveniente de la calle, que de cualquier otra cosa. Guille tenía que venir en cualquier momento… Su abuela les había dicho que ya habían salido del Hospital. Aún no lo conocían… El día que nació, Val se había puesto mala y sus padres no habían querido que fueran al Hospital así que se habían quedado en casa de los abuelos hasta hoy, 3 dias más tarde.

Oyeron un coche entrar en la calle y miraron a su abuela… las tres sonrieron y corrieron a la ventana! Falsa alarma!! Volvieron cada una a sus “quehaceres”… ellas a inspeccionar sus caja de recuerdos y su abuela, a la lectura…

¿Una llave en la puerta? No podían ser ellos!! No habían oído el coche!! Como una exalación, se plantaron en un plis en la entrada de la casa y allí estaban… sus padres!! Y Guille en los brazos de su madre… Empezaron a dar saltos alrededor mientras pedian verlo…. Su padre se interpuso entre ellas y el bebé… “Tranquilas, chicas!!! Está dormido y lo vais a despertar con tanto salto… Vamos al salón… despacito… y allí lo veis…”

Ellas se miraron y se llevaron el dedo a los labios… pidiendose silencio… mientras se digirían al salón donde ya les esperaba su abuela, con una sonrisa de oreja a oreja.

Su madre se sentó en el sillón del abuelo mientras ellas estiraban sus cuellos…. compitiendo para ser la primera en ver a su hermanito… Y allí estaba… con los ojos cerrados, dormido plácidamente y poniéndoles “morritos”. Miraron a su madre y con mucho cuidado, se abrazaron a ella… y a Guille.